La primera edición deportiva de La Ruta de la Sal se celebró en el año 1989. En esta primera regata, que fue una iniciativa de la asociación ANAM, 36 embarcaciones salieron desde el puerto barcelonés de Port Ginesta en dirección a Las Islas Baleares, el destino final del recorrido. A partir del 1990 el número de inscritos fue en aumento y por eso desde 1992, la Ruta de la Sal se ha convertido en todo un fenómeno sociológico con más adeptos cada año que pasa. Actualmente el número de inscritos no baja de 300.
El origen de este acontecimiento deportivo lo encontramos en un hecho histórico que marcó una parte de la historia de Cataluña. En mayo de 1846, durante la "Rebelión de los Marineros" Barcelona sufrió un bloqueo por parte de los ejércitos carlistas que provocó una carencia de sal tan importante que la ciudad condal se vio en peligro.
Ante esta situación, el ingenio de un hombre de negocios barcelonés se puso de manifiesto: los primeros en transportar sal de las Salinas Baleares hasta El Garraf (Barcelona) cobrarían oro por los servicios prestados. Un total de 13 embarcaciones participaron en esta "regata" improvisada y las tres primeras recibieron alguna compensación económica.
Actualmente, la Ruta de la Sal moviliza cada año más de 2000 regatistas que conmemoran con su quiniela por el mediterráneo las rutas del siglo pasado. También se considera una de las más importantes que se hacen en España y de las más difíciles debido a que se celebra en abril, una época del año meteorológicamente complicada.
Fotografía: XXIII Ruta de la Sal 2010 Alfred Farre.com/ ANAM
Texto: Mar Mampel